martes, 26 de junio de 2012

¡Salud!


No, no importa, nunca importa. 
Ni el calor que va y viene,
ni las ideas estáticas que no se detienen.
Un sueño más, un sueño menos.
El sol que se va y no piensa regresar.


¡Salud! Por el momento que jamás recordaré
y una copa más por el que nunca viviré.


Una lágrima que nadie llora,
y el tiempo que detiene los pasos.
Se acompañan las voces silenciosas
con un respiro que no tiene fin.
Pedazos de una historia sin contar,
pero no importa, nada importa.


Ni con principio y fin basta para ser,
caminar y ver es sólo aparentar
la egocéntrica afición 
de desperdiciar lo que no se tiene
y de existir cuando no se debe.
Aunque, no importa, jamás importa. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario